Monday, July 31, 2017

Zoé en Miami

Foto por Reni Arias
Zoé Valdés ha desembarcado en Miami, y aunque no se trata ni con mucho de una primera vez sí tiene algo de definitiva; porque si bien tampoco implica una mudanza, sí tiene algo de catarsis y comunión, con un exilio cada vez más desfigurado pero que reclama su dignidad. En Miami, Zoé se ha topado con una moda tan vieja hoy como la internet, porque es la internet la que la ha propiciado; y es el ataque feroz contra ella, excesivo e injusto, por su naturaleza ad ominem y subjetiva. Se llega al absurdo de negarle méritos literarios, que tampoco es que necesite que se le reconozcan; su literatura está ahí, y cubre un espectro más amplio que los sueños desmedidos de los pretenciosos.

El problema con Zoé puede residir en su extrema marginalidad, que ella exhibe como su propia majestad y naturaleza; porque ahí precisamente reside su libertad individual, refulgiendo más allá de todo convencionalismo, sobre todo en sus triunfos; que son especiales, porque son en aquellos esfuerzos en que los demás son exactamente convencionales. Todo eso hace que su proyección sea extremadamente compleja y controversial, sobre todo en lo político; donde ella se mueve intuitivamente, haciéndose llamativa para las manipulaciones retóricas, a las que será susceptible. Eso no debe ser ningún problema, la vida es un constante crecimiento a través de la prueba y el error; eso no sólo es dialéctico, antes respondió a la determinación de la substancia, y era aristotélico.


Ver video de presentacion en Youtube
Eso también es inevitable, como la violencia que vaticina, en unas relaciones que sólo pueden ser turbulentas; porque esas manipulaciones se dirigen a lo que ella no necesita, y sobre todo porque es una persona leal. No obstante, entre las críticas que se le hacen, está precisamente la de la deslealtad y la arrogancia; que demuestran la mezquindad de sus críticos, porque ella no necesita derivar su importancia de nadie; sino que al contrario, la otorga, que es la razón por la que deviene en molestia para quienes se aprovechan de ella. Las desavenencias en ese sentido provienen justamente de sus errores, prohijando malagradecidos arrogantes; que como va a descubrir que es común en Miami, no tardan en morder la mano que los sostiene, no más se creen un poco fuertes. 
Sus invectivas no han hecho sino desnudar la hipocresía y la falsa modestia de quienes pretenden manipularla a perpetuidad; porque si algo bueno tiene, es la rapidez de reflejos con que se vuelve, no más se da cuenta del timo. Eso es lo que hace previsible el próximo desarrollo de la veneración que le ha prodigado el patético elitismo local; que en algún momento le tratará de cobrar bien caro la falta de arrogancia intelectual, que tanto pone de relieve su propia substancia ante la insubstancialidad de ellos; sobre todo por esa ambigüedad inicial, por la que su propia proyección zafia se puede confundir con la procacidad como carácter y no atributo estético.
Zoé será, en todo caso, una personalidad a admirar de lejos desde este último arribo a Miami; so pena de morir a dentelladas, en la jauría que se disputarán su sombra para engrosar sus grants y CV's. Pero aún eso será un despliegue del magisterio misterioso de Dios, que servirá para exponer nuestras inconsistencias; lo que siempre es bueno, no importa lo costoso, como todas las crisis que conducen a la plenitud y madurez.

Seja o primeiro a comentar

  ©Template by Dicas Blogger.

TOPO