La obscenidad del artista postmoderno
Santiago Sierra |
Para Elvia Rosa Castro y Yiki González
Esa fatalidad no es terrible sino curiosa, señalando a la emergencia de un nuevo desarrollo, en su ajuste de la realidad; que determinada reflexivamente como humana en tanto cultura, la expone a la falencia de las estructuras culturales. La aplicación de la entropía a la cultura, no es entonces una metáfora, sino la expresión de su determinación estructural; que es trascendente, al partir de la potencia absoluta de toda la posibilidad de eso humano, para realizarse en su inmanencia.
Tania Bruguera |
Es a eso que se debe la obscenidad del artista
postmoderno, en el patetismo de su falso sentido de aristocracia; que es ya
insostenible, porque el desarrollo emergente proviene de las ciencias, en un
nuevo trascendentalismo. Partiendo de lo subatómico, esto pone fin al
racionalismo, que tiene su génesis en el Idealismo platónico; recuperando el
pragmatismo realista, vencido desde la supremacía cristiana con su falso
humanismo, hasta esta franca obscenidad.
Antuán Rodríguez |
Los ejemplos pueden ser banales como el caso Cattelan,
pero también obscenos, como el de Santiago Sierra; el artista español que
repite lugares comunes de crítica social, literalmente sobre la espalda de las
personas sobre las que reflexiona. Sin embargo, que un individuo alcance cotas
inimaginables de obscenidad es también y apenas natural, no extraño; pero sí es
más obsceno todavía es que algún artista se encandile con esa obscenidad, como
si esta fuera estética.
Mauricio cattelan |
La obscenidad puede pasar desapercibida en ese afán de triunfo, tan seudo burgués como este seudo aristocrático; pero no para la persona obligada a lidiar con la falsa equivalencia moral, sustentada en la no menos falsa superioridad intelectual. Más que moral, como hermenéutico, el problema no sería sino otra expresión entonces del carácter entrópico de la postmodernidad; la obscenidad de cuyo arte sólo muestra la disonancia en que pierde relevancia, incapaz de participar del nuevo trascendentalismo.
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