El escritor, de Maurice Sparks
http://losrelatosdemauricesparks.blogspot.com/2010/05/el-escritor.html
Es así también que aparece la literatura de Maurice Sparks, cuya ficción se expande al nombre mismo [seudónimo] del autor; y a lo que quizás sea la joya más lograda de su colección, el cuento El escritor. Hace ya tanto tiempo que es un clásico, el argentino Jorge Luis Borges llamó la atención del juego de literatura en la Literatura; refiriéndose a un pasaje de las Mil y una noches, en que Scherezada contaba al rey Schariar la historia que estaban viviendo. El la novela La historia interminable, Maikel Ende amplía la ficción; con una entrada dramática en que la historia ficticiamente precisa del lector para ser continuada, lo que no era sino una parábola un poco retorcida de los procesos ontológicos.
Es así, en cualquier caso, que se explica la tendencia de las disciplinas a retroalimentarse; es decir, a alimentarse de sí mismas, interesadas en el profundo valor dramático que las lleva a realizarse. De ahí ese alcance parabólico sobre los procesos ontológicos, reflejados en la eficacia del arte cuando es excelente; como es el caso de esta joyita de Maurice Sparks, que manejando con destreza las exigencias de la lectura cíber, lleva a punto las búsquedas tradicionales sobre el cuento breve. Este quizás sea el más excelente de los cuentos de Sparks, debido precisamente a su parquedad sintáctica; con la que logra la tensión de atmósfera que requiere un thriller, y que en literatura de soporte tradicional requiere de complejas gramáticas para la recreación.
La intensión primera de este post era la publicación del texto, pero es preferible redirigir al lector al sitio original; aspirando sólo a contar con las contribuciones de ese autor para una sección propia si ese fuera su interés.
La aparición y el desarrollo de un medio, siempre conmociona a la estructura que integra; ésta ha de reacomodar sus componentes haciendo lugar al nuevo, terminando en su propio ensanchamiento. Así, la aparición y desarrollo de la realidad virtual ha descolocado ciertos elementos de la cultura; que un poco dispersos aún, han de reorganizarse nuevamente, volviendo las aguas a su nivel. Es así que ha aparecido una especie de subgénero literario, propio de la internet; que no es virtual sino consistente como cualquier otro, aunque con sus reglas y recursos formales propios.
Es así también que aparece la literatura de Maurice Sparks, cuya ficción se expande al nombre mismo [seudónimo] del autor; y a lo que quizás sea la joya más lograda de su colección, el cuento El escritor. Hace ya tanto tiempo que es un clásico, el argentino Jorge Luis Borges llamó la atención del juego de literatura en la Literatura; refiriéndose a un pasaje de las Mil y una noches, en que Scherezada contaba al rey Schariar la historia que estaban viviendo. El la novela La historia interminable, Maikel Ende amplía la ficción; con una entrada dramática en que la historia ficticiamente precisa del lector para ser continuada, lo que no era sino una parábola un poco retorcida de los procesos ontológicos.
Es así, en cualquier caso, que se explica la tendencia de las disciplinas a retroalimentarse; es decir, a alimentarse de sí mismas, interesadas en el profundo valor dramático que las lleva a realizarse. De ahí ese alcance parabólico sobre los procesos ontológicos, reflejados en la eficacia del arte cuando es excelente; como es el caso de esta joyita de Maurice Sparks, que manejando con destreza las exigencias de la lectura cíber, lleva a punto las búsquedas tradicionales sobre el cuento breve. Este quizás sea el más excelente de los cuentos de Sparks, debido precisamente a su parquedad sintáctica; con la que logra la tensión de atmósfera que requiere un thriller, y que en literatura de soporte tradicional requiere de complejas gramáticas para la recreación.
La intensión primera de este post era la publicación del texto, pero es preferible redirigir al lector al sitio original; aspirando sólo a contar con las contribuciones de ese autor para una sección propia si ese fuera su interés.
1 Comentário:
Gracias, Ignacio, por tu generosidad. Me ha gustado mucho tu reseña. Y no porque lo que dices sobre mis relatos (lo cual te agradezco) sino porque me has puesto a pensar en ciertos temas sobre los que no me habia detenido a pensar. Puedes contar con mis colaboraciones.
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